martes, 14 de junio de 2011

Carceles

Pasa otro día… y siguen llenándome la cabeza las mismas preguntas… los mismos recuerdos… las mismas escenas… sigo oculto dentro de mí mismo… sigo meditando en el mismo sitio de siempre… dejándome en manos de otro…

Pasa otro día… y sigue escondido aquí dentro… sigue pensando en lo mismo… me toca salir a estirar las piernas esta vez… noto el aire en mis mejillas mojadas… sé que no soy yo quien llora… oigo los gritos desesperados del dolor… pero yo no soy así, solo camino, sigo en pie… solo respiro…

Recuerdo su aroma… recuerdo sus labios… cada noche con la misma respiración agitada… pues no es ese hecho… no es la respiración… es el sentimiento… mis brazos intentan abarcar cada noche algo que no está… algo que se ha ido… respira profundo… olvídalo… no lo entenderías… no eres como yo…

Vuelta a lo mismo… oigo las frases reiteradas de sus pensamientos… deja el tema… no consigues nada con repetirlo… nada salvo recordarlo… no olvidarlo… no tienes por qué salir a dar la cara, sabes que la daré yo, volveré a encajar los golpes del destino, los gritos destrozándome en mi interior… pues para algo soy tu parte contraria, para algo he plantado cara a todo lo pasado, y nada me ha tumbado.

Vivo en una jaula hecha de mis pensamientos, un rincón de mi mente que nadie conoce, en un pellizco de lo que nunca sacaré, lo que nunca conoceréis… a cada paso que doy recuerdo el anterior, a cada momento que vivo le añado una pequeña pero valiosa sonrisa, un poco de credibilidad a esta mentira… no intento convencerme de nada, solo recuerdo, tan solo vivo… cárceles de pensamientos, de cada momento que he vivido… no intento comprender el camino que marcaban tus dedos en mi espalda, solo sé el que hacen las lágrimas en mi cara…

Morfeo

Vuelven a aparecer

Esos dedos resbalando poco a poco

Dejando caer

Besos en mi espalda y silencios rotos

Pues no trata de querer, trata de amar

No intenta convencer, solo derramar

Esos suspiros que me quieren levantar

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No hay palabras que pronunciar

Ni momentos que desperdiciar

Solos ante la atenta mirada del olvido

Que solo quiere que este necio olvide

Olvide cada beso, cada minuto dormido

Olvide cada caricia, cada verso que mide

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Pues te entrego mi corazón en mano

Ya que se pasa día y noche gritando

Recordando esas caricias que lo duermen

Esos besos que cada mañana lo despiertan

Ya que dormirlo Morfeo no puede

Ya que solo contigo se alegra